Gestión de la calidad
La calidad es el grado de cumplimiento de los requisitos del cliente, o al menos así lo establece la norma ISO 9001:2015 para los Sistemas de Gestión de Calidad
Cumplir con los requisitos del cliente es una tarea para todas las organizaciones, sin importar su giro.
Para las empresas de la cadena de alimentos, es indispensable alinear los requisitos de calidad y los requisitos de inocuidad para volverlos un objetivo común y no objetivos por separado, para evitar la duplicidad.
¿Qué abarca la gestión de la calidad?
Para la norma ISO 9000, los aspectos a cubrir son:
Contexto de la organización: comprender la situación que vive la empresa y como el entorno puede afectar sus resultados. También debe determinar el alcance o el marco en donde quedará su SGC y cuáles son sus procesos.
Liderazgo: cualquier organización debe tener un rumbo hacia donde dirigirse y los líderes deben mostrar ese camino.
Planificación: se identifican los riesgos y oportunidades relacionados con el contexto que se reviso previamente, los objetivos y cómo gestionar los cambios. Para muchas organizaciones, lo más difícil es incluir los cambios en su SGC.
Apoyo/Soporte: para poder lograr los objetivos planteados, es necesario que la organización cuente con recursos económicos, infraestructura adecuada, personas competentes y conscientes de su impacto en la calidad de los productos y que tengan una comunicación que permita las decisiones y acciones oportunas. También se requieren documentos y registros para controlar y estandarizar las actividades.
Operación: en esta fase, ya que se tiene un rumbo marcado por unos líderes, personas, infraestructura y know-how, se cubre la cadena de valor, desde la planificación de las operaciones, determinación de los requisitos, concepción de productos y/o servicios, compras, hasta la producción o prestación del servicio y entregas. También se considera que nada es infalible y puede haber "no conformes".
Evaluación del desempeño: ya que se ejecutaron todas las actividades se dan dos pasos atrás para evaluar si los resultados son los esperados. Para lograrlo, se analizan resultados, se hacen auditorías internas y se realiza la revisión por la dirección.
Mejora: una vea que el sistema camina, se puede dar el brinco a la mejora, aprendiendo de los errores, con las no conformidades y acciones correctivas y con tareas de mejora, que van a impulsar a la organización uno o algunos pasos más adelante.
